lunes, 4 de febrero de 2013

Un poco de historia.


Desde la prehistoria, el ser humano ha tenido la necesidad de comunicarse corporalmente, para expresar así sus sentimientos y estados de ánimo.
Al principio, la danza se usaba básicamente en rituales de fecundidad, caza, guerra, o carácter religioso, donde la propia respiración o el latido del corazón servían para darle cadencia a la danza.

El ballet surgió en el Renacimiento italiano, aunque fue en Francia donde surge la necesidad de la profesionalización y en 1661 se crea la primera escuela de danza, Académie Royale de la Danse. En 1713 se creó la segunda Académie Royale, que hoy es conocida como la Ópera de París.

Existen muchos tipos de ballet, tales como el cortesano, el de acción, el romántico... pero el que voy a tratar más en profundidad será el ballet clásico.


Foto del ballet de El Lago de los Cisnes.

Ballet clásico.


El ballet clásico es el más formal de los estilos de ballet,  y se adhiere a la técnica tradicional del ballet. Hay variaciones según el lugar de origen, como el ballet ruso, el francés, o el italiano. Entre sus características distintivas están el uso de las puntas, sus gráciles, fluidos y precisos movimientos, y sus cualidades etéreas.
Está basado en pasos, posiciones y formas de cargar el cuerpo que se originaron en el siglo XVIII con el trabajo de Jean-Georges Noverre.

CARACTERÍSTICAS.

Todos los tipos de ballet exigen años de preparación, pero este en especial exige muchos años tanto de preparación en forma como en técnica. 

El vestuario propio son los leotardos y las medias, acompañados de una falda opcional llamada tutú. 
Las bailarinas usan zapatillas de media punta hasta que los huesos y los músculos son lo suficientemente fuertes como para soportar las de punta, en cambio, los bailarines, sólo utilizan las zapatillas de media punta, y en muy raras ocasiones usan las de punta para trabajar los huesos del pie, como el empeine. 
Hay que tener en cuenta que los huesos de los tobillos y de los pies deben ser lo suficientemente fuertes para ir en pointe (en punta), por lo tanto, los aprendices de esta materia no empiezan a trabajar con las zapatillas de punta hasta el final del primer año, cuando los huesos y músculos ya comienzan a ser lo suficientemente fuertes como para no sufrir grandes dolores, los cuales son inevitables al comienzo en el aprendizaje del ballet.

Aunque todo el mundo comparte una misma base, hay muchas variaciones regionales.
En la actualidad se ha ido diversificando el ballet desde las técnicas hasta la soltura a la hora de bailarlo.
Las técnicas son una parte esencial, ya que ellas son la herramienta principal con la que se forma un bailarín, le proporcionan la base del baile, para que con ella el bailarín pueda expresar todo cuanto quiera.
Algunos de los bailarines más reconocidos tanto en activo como ya retirados son Ana Pavlova, Maximiliano Guerra, Isadora Duncan, Maia Plisestkaia, George Balanchine, Esmeralda Agoglia y Julio Bocca, entre otros.


También se utiliza el término ballet para designar una pieza musical que ha sido compuesta para que sea representada por medio de la danza.

'Tú no tienes que saber nada acerca del ballet para disfrutarlo, todo lo que tienes que hacer es mirarlo'. - Edwin Denby.